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Mostrando entradas de junio, 2024

El Elemento

Santiago Moll  me llevó en 2016 hasta El elemento después de haber oído hablar decenas de veces de Sir Ken Robinson. A Montserrat del Pozo, a Richard Gerver y a cuantos piensan y escriben que la escuela tiene que cambiar. Y que todo empieza por maestros que entiendan la educación y la vida en la escuela como lo que da sentido a sus días y sus noches. Me dejó incómodo. Porque denuncia que la escuela mata la creatividad, con tanta obsesión por el programa, y con una organización que la ahoga. Y me enseñó que no se puede explicar nada, a nadie, si no es empezando con una buena historia. El libro empieza así:  hace unos años oí una historia maravillosa que me gusta mucho explicar. Una maestra de primaria estaba dando una clase de dibujo a un grupo de niños de seis años de edad. Al fondo del aula se sentaba una niña que no solía prestar demasiada atención; pero en la clase de dibujo sí lo hacia. Durante más de veinte minutos la niña permaneció sentada ante una hoja de papel, completamente

Nadie es de nadie

Los padres deberíamos ser los más interesados -dice Daniel Innerarity- en liberar a nuestros hijos de nuestra presencia monopolística.  Y yo lo que veo es que muchos no están dispuestos a hacerlo. Que ni se plantean que lo suyo con los hijos sea un monopolio. Nuestra responsabilidad -continúa Innerarity- en su educación y nuestro derecho a decidir qué educación queremos para ellos debe incluir el compromiso de educarlos en un espacio común, compartido con quienes no les dispensan el mismo afecto que nosotros y en el que reciban un contraste real con nuestro modo de vida particular. Pero no. Los gobiernos del PP y Vox promueven o consienten el voto parental para excluir contenidos y actividades del proyecto de la escuela que ellos mismos eligieron, las mesas de los inspectores de Educación se llenan de quejas de padres contra tutores y contra tutoras, por lo que oyen a sus hijos e hijas decir que aquellos dijeron en clase, y tantos y tantas recurren a la escuela concertada huyendo de